La mayoría cree que para comer mejor, hay que hacer más cosas; como preparar la comida en casa, comprar, lavar, pelar, cocer, freír, hervir, etc. Pero ¿qué pensarías si te dijera que hay ciertos alimentos que puedes aprovechar más sin pelarlos? Las cáscaras, aunque feas, pueden ser fuentes ricas en vitaminas, minerales y antioxidantes.
Manzanas
Si le quitas la cáscara a una manzana, le quitas la pectina, una fibra soluble que ayuda a regular y disminuir el mal colesterol y azúcar en la sangre. La pectina también alenta la digestión, eliminando así muchos antojos durante el día.
Zanahoria
Las zanahorias son ricas en componentes llamados poliacetilenos, y según varios estudios, tienen el potencial de matar las células cancerígenas humanas. También tienen propiedades antiinflamatorias, antibacterias y antihongos. Y resulta que tales componentes están concentrados justo debajo de la cáscara, así que lo más recomendable es dejar la piel intacta.
Papa
Gramo por gramo, la cáscara de la papa tiene más fibra, hierro y ácido fólico que la papa misma. También te recomiendo elegir papas muy oscuras (moradas principalmente) porque contienen más antioxidantes.
Pepino
Los pepinos pelados tienen menos calcio, magnesio, fósforo, potasio, vitamina Z y Vitamina K. Sin mencionar que la mayor parte de la fibra del pepino ¡está en la cáscara! El resto es casi pura agua
Berenjena
La piel de la berenjena es rica en un antioxidante llamado nasunin. Este componente sigue siendo el foco de muchas investigaciones, pero se cree que podría ser importante para mantener una buena salud del tejido cerebral. Asimismo es parte de una familia grande de antioxidantes (flavonoides) que evitan el sobrepeso.
Uvas
Seguro nunca has pelado una uva en tu vida… y lo ideal es que no empieces a hacerlo. La piel de la uva es rica en resveratrol, un fitoquímico que beneficia la salud cerebral y cardíaca. También se ha demostrado que alenta el crecimiento celular cancerígeno.
