Las clases han comenzado, desafortunada o gratamente para algunos, la escuela seguirá siendo tomada desde casa. Cuando asistíamos a un salón de clases de manera presencial, se daba la interacción con nuestros compañeros, amigos y maestros; charlábamos sobre la última vez que fuimos al cine, aquella asignatura que odiábamos, esos problemas personales que requieren consuelo, cosas triviales o sin sentido. Sin embargo, llegó el Covid-19, y las palmadas en la espalda, los abrazos cuando se vuelven a ver los amigos después de un periodo de vacaciones; se terminaron.

La nueva cotidianidad supone grandes retos en la mayoría de los sectores en México, sobre todo en la educación. Los directivos han hecho grandes cambios para darle un sentido de normalidad a la enseñanza a distancia; los docentes han aprendido nuevos métodos para hacer llegar el aprendizaje al alumno.

Pero el reto más grande se encuentra en casa, es decir, los estudiantes son la punta de lanza en este nuevo ciclo escolar.

Las distracciones siempre han estado al alcance de cualquiera, sin importar el lugar donde nos encontremos, sirven para “despejar” la mente de alguna actividad que requiere mucha atención, y ahora, que los teléfonos inteligentes son parte de nuestra vida, las tenemos en la palma de la mano. ¡Literal!

Es muy común desatender la clase desde un monitor o dispositivo electrónico, y más, cuando tenemos al lado el celular. Las diferentes aplicaciones brindan al usuario, una gama muy amplia de entretenimiento: permiten mandar mensajes al amigo o familiar (Whatsapp, Messenger), ver cuál es la tendencia semanal (Tik Tok), enterarse de las noticias del momento (Twitter), inspirarse con un atardecer (Instagram), u observar la última publicación de la tía en el extranjero (Facebook), entre muchas otras. Cuando tenemos tiempo de sobra no hay problema, pero cuando la clase comienza, es ahí, que las consecuencias de tales distracciones no nos van a gustar.   

Por eso, te daré algunos tips que puedes implementar para sobre llevar esas distracciones, y aprovechar el tiempo de tus clases virtuales.

• Ordena tu lugar. Al tener un espacio desordenado y sucio, las ganas de estar ahí, son muy pocas, por eso es necesario organizarlo con el material necesario a la mano.
• Modo avión. Si eres un estudiante que puede prescindir de recibir avisos o llamadas, ¡hazlo! Desactiva o bloquea cualquier notificación.
• Prepara un snack. Antes de comenzar la primera clase o si tienes una hora libre, prepárate un delicioso aperitivo para alimentar tu cerebro (café, barras nutritivas, smoothie, semillas o fruta seca).
• Bebe agua. Tu cerebro necesita energía, pero tu cuerpo necesita agua. Descarga una aplicación — es la única admitida — en tu dispositivo inteligente que te permita recordar cuándo y cuánto deberías tomar de este preciado líquido.
• Toma apuntes de la clase. Para mantener tu mente enfocada, divide una hoja de tu cuaderno en un mínimo de tres apartados, donde anotarás: Ideas principales, dudas o preguntas, y mapas mentales. Todo esto con la información de la clase.
• Termina tus trabajos o tareas. La escuela en línea pueden llegar a ser tediosa, por lo que si dejas pasar algunas horas después de acabar con las clases, te va a ser mucho más difícil terminarlas que hacerlas inmediatamente al termino de tu jornada escolar.
• Motívate. Busca la forma de no caer en la cotidianidad. Encuentra inspiración, saca a tu mascota a pasear, convive con tu familia, habla con tus amigos, lee un buen libro, o haz ejercicio, pero no dejes que la rutina te atrape.

Espero que estos consejos ayuden a sobre llevar con éxito la escuela virtual, pero más que nada, que disfrutes tus clases y aprendas en el proceso.

Por Carlos A. Rodríguez / profecarlos013@gmail.com