Por Weekend / Foto: Internet
Tus hijos son inteligentes, simpáticos y son buenos en todos los aspectos, pero empiezan a ir al colegio y de repente, sin saber por qué, comienzan a tener problemas.
Quizá estos no sean de adaptación ni de comportamiento sino de aprendizaje y aunque sigan siendo los niños más maravillosos del mundo, tendrás que ayudarlos a que controlen este problema.
Cómo afecta
Un niño con problemas de aprendizaje tiene dificultades con destrezas como la lectura, la ortografía, para escuchar, hablar, razonar y con las matemáticas.
Pero esto no quiere decir que sea perezoso o vago sino que su cerebro procesa la información de una manera diferente.
Por lo general, los problemas empiezan a ser identificados desde los cinco años, cuando acude a la escuela. Si la dificultad perdura, se puede pedir una evaluación por parte del colegio para confirmar si tiene problemas de aprendizaje o no.
8 señales
- Dificultad para entender y seguir tareas e instrucciones.
- Dificultad para asimilar y recordar lo que alguien le acaba de decir.
- Dificultad para dominar destrezas básicas de lectura, deletreo, escritura y/o matemática.
- Dificultad para distinguir entre la derecha y la izquierda, para identificar las palabras, etcétera. Su tendencia es escribir las letras, palabras o números al revés.
- Dificultad de coordinación para caminar, hacer deportes o incluso para vestirse o amarrarse el cordón del zapato.
- Dificultad para organizar y mantener a los libros y material escolar.
- Dificultad para situarse en el tiempo.
- Dificultad para controlar su irritación o excitación.
¡Actúa a tiempo!
Si tus hijos tienen una o más dificultades de las mencionadas, sería bueno que lo comentaras con su profesor y buscaras ayuda cuanto antes. La falta de un control de los problemas de aprendizaje puede llevar a los niños a mayores problemas como el fracaso escolar y de inadaptabilidad social. Solo un especialista puede determinar si tienen problemas para aprender porque sufren de trastornos como la dislexia, hiperactividad, autismo o problemas de lenguaje.