Por Weekend / Foto: Internet
Desde los primeros días y años de vida los hijos desarrollan un vínculo especial con sus padres. Durante los primeros meses quizá sea más fuerte con la parte materna, pero conforme crecen su lazo también se fortalece con la figura paterna.
Y es que el papel del padre en la educación de los hijos es tan vital como el de la madre. Aquí te dejamos algunas claves que lo explican.
- Se ha demostrado que si un padre está presente en la vida de su hijo desde la gestación, se creará una unión especial entre ellos progresivamente. Está claro que el vínculo es positivo para el desarrollo del niño, produciendo en él efectos que favorecerán a su desarrollo, como el ser más independiente, autónomo y creativo.
- La protección que puede brindar un padre a su hijo es de vital importancia, ya que supone una ayuda irremplazable para afrontar los problemas que se pueda encontrar en su vida de una mejor manera.
- Es bueno que cada uno tenga distintos roles en la educación de sus hijos. Pero mantener siempre una buena comunicación entre padre y madre es muy importante para que el niño se sienta seguro y querido.
- Las responsabilidades deben compartirse, es primordial que el padre se involucre en la crianza de los hijos y que no mantenga una relación distante dejando la mayoría de las actividades con ellos en manos de la madre.
- Una actividad muy sencilla que te proponemos es leer cuentos o historias a tus hijos, con las cuales les ayudarás a desarrollar habilidades cognitivas y verbales, fortaleciendo a la vez la relación con ellos.
