Los lujos y la vida presuntuosa de una estrella son lo más alejado que existe del actor Keanu Reeves, a quien le da igual comer en la calle, viajar en metro o vivir en un departamento modesto.

Es un ermitaño hollywoodense -si así lo quieren llamar- que en sus 35 años de carrera nunca se ha encandilado por la fama y ha conservado intactas su carisma y humildad, a pesar de que su nombre figura en grandes producciones.

Tales como la saga de acción que protagoniza desde el 2014 y que este fin de semana estrena su tercera entrega: John Wick.

Un papel que llegó para darle un nuevo impulso a su carrera e incluso, a sus 54 años, lanzarlo como embajador de la prestigiosa firma francesa Ives Saint Laurent.

Con cabello largo, barba y un estilo muy rockero, sus primeras imágenes de la colección otoño-invierno 2019, han causado gran furor.

Y no es para menos, si consideramos que esta es la primera vez que cambia el set de filmación por el estudio fotográfico.

La campaña estuvo a cargo del director creativo de la marca, Anthony Vacarello y detrás de la lente estuvo el célebre David Sims.

Una vida de aprendizajes

Keanu nació un 2 de septiembre en Beirut pero se crió en Canadá, lugar al que emigró su madre, tras el abandono de su padre cuando era pequeño.

Desde aquel momento la vida del actor estaría marcada por varios sucesos que lejos de derrumbarlo lo harían más fuerte como la leucemia de su hermana, el fallecimiento de su mejor amigo River Phoenix y de la primer hija que tendría con su novia Jennifer Syme, quien más tarde también murió en un accidente de tráfico.

Y quizás es también en esto que ha vivido donde reside su sencillez, ya que ha mencionado que para él la idea de la felicidad está “relacionada con acostarme en la cama con la persona que amo, compartir una cena con amigos o ir en moto. No tienen nada que ver con un saldo bancario de varios dígitos”.

De Neo a John Wick

La carrera de Keanu inició en 1984 pero fue hasta 1991 cuando consiguió su primer papel importante en ‘My Own Private Idaho’.

Después le siguieron algunos personajes como el agente novato del FBI, Johnny Utah en ‘Point Break’, el abogado Jonathan Harker en ‘Drácula de Bram Stoker’, el príncipe Siddhartha en ‘Little Buddah’ y el policía Jack Traven en la taquillera ‘Speed’ al lado de Sandra Bullock.

Pero sin duda el que lo llevaría a la fama mundial fue el que interpretó justo hace 20 años, el hacker Neo de la saga de ‘Matrix’.

Y antes de llegar a convertirse en el asesino a sueldo, John Wick, pasó por títulos como ‘The Gift’, ‘Constantine’, ‘The Lake House’ y ’47 Ronin’, entre muchos otros.

Sobre éste último papel, ha declarado que le gustaría seguir “tan lejos como mis piernas me puedan llevar. Tan lejos como la audiencia quiera ir”.

Las motos: su pasión

A mediados de los ochentas, Keanu tuvo que aprender a andar en moto para trasladarse al rodaje de una película sin imaginar que así iniciaría toda una pasión.

La Norton Commando 850 fue una de sus primeras adquisiciones al llegar a Los Ángeles y a la fecha, la mantiene en gran estado, confesó recientemente a GQ.

Una Ducati 998, la Guzzi Griso y algunas deportivas como la Yamaha R1M y una Kawasaki ZX-10R también son parte de la colección del co-socio de la empresa Arch Motorcycles.

“Cuando no voy en moto paso por síntomas de abstinencia… no es bueno para mi salud”, aseguró y agregó que es un buen momento para pensar y escaparse.

En ‘John Wick 3: Parabellum’ lo veremos conducir la nueva Yamaha MT-09.

5 cosas que no sabías de Keanu

1. Su nombre es hawaiano y significa “brisa fresca sobre las montañas”.

2. Tiene ascendencia china, hawaiana, inglesa y portuguesa.

3. Practicó hockey en el colegio y era apodado ‘The Wall’.

4. La música es otra de sus pasiones y fue bajista de la banda Becky.

5. Aprendió más de 200 movimientos de artes marciales para ‘Matrix’ y tomó clases de surf para ‘Point Break’.