Tanto en la escuela, como en el parque o en cualquier otro ámbito donde ocurre la interacción social entre los niños puede darse la desafortunada circunstancia en que uno se burle del otro.
Esto indudablemente debe ser corregido por los padres del pequeño que se burla, puesto que la educación emocional, los valores y el respeto por los demás empieza en casa.
Hay padres que cuando se enteran que su hijo es quien se burla no le dan mayor importancia porque no es su hijo ‘quien sufre’.
La realidad es que el niño que se burla es el que realmente se siente más débil, pero tiene que ponerse una máscara de hostigador para poder sentirse bien.

Consecuencias negativas

Si los adultos no intervienen en estas graves situaciones, el niño que se burla tendrá consecuencias tan graves en su desarrollo como:

• El rechazo
• Mal aprendizaje en la escuela
• Malas habilidades sociales
• Aumento de agresividad, inseguridad personal e ignorancia en cuanto a las normas y comportamiento social
• Baja autoestima

¡Alto a las burlas!

Los padres deben trabajar desde casa y ser constantes para que el niño entienda que es un comportamiento totalmente inaceptable. Sigue estos tips:

Promueve la empatía

Es muy importante que los niños aprendan a través de la educación emocional qué es la empatía, ya que es fundamental para que puedan entender cómo se sienten los demás cuando están siendo atacados con burlas.

Refuerzo positivo

El refuerzo positivo siempre tiene más éxito para el cambio de conducta que el refuerzo negativo, por este motivo busca cuando tu hijo se esté portando bien y no dudes en felicitarle por ello.

Sé el mejor ejemplo

Si quieres que tu hijo no se burle de los demás, resulta obvio que nunca tendrás que burlarle de alguien sin que la otra persona esté delante y menos con la presencia de tu hijo. El respeto hacia los demás empieza en ti.

Fuente: www.guiainfantil.com