Poder habitar universos diferentes y provocar un sinnúmero de emociones a la audiencia es la mayor satisfacción que la actuación ha dejado a Luis Felipe Tovar, quien ha desarrollado esta profesión por 37 años, tiempo en que ha logrado el reconocimiento internacional.

Oriundo de Puebla, Luis Felipe cuenta a WEEKEND que a la edad de 14 años llegó a la Ciudad de México, donde se formó como actor en el Instituto Nacional de Bellas Artes, de donde luego partió para seguir con su preparación.

“Hice mi carrera de actor en el Instituto Nacional de Bellas Artes, ya tenía muy claro desde muy joven que quería profesionalizarme en el mundo de la actuación, después me especialicé en Cuba en el área de cine y poco tiempo después funde mi escuela”, dice quien tiene 100 películas y alrededor de 20 telenovelas.

Actor, maestro, productor y director

Actualmente, además de actor se desenvuelve como maestro de actuación, productor y director, actividades que mezcla entre el teatro, el cine, la televisión y su escuela, el SET, un reconocido plantel fundado hace 17 años y por el que han pasado famosos como Silvia Navarro, Sergio Basáñez, Sherlyn, Iliana Fox, Omar Chaparro, Adrián Uribe, Eduardo España y Luis Roberto Guzmán, además de los juarenses José Lomas-Hervert y Alfredo Castruita.

“Cuando no estoy en el teatro, estoy en la tele y cuando no estoy en la tele, estoy en la escuela, prácticamente todo mi tiempo libre estoy ahí, más el tiempo que le dedico al entrenamiento de mis alumnos que están profesionalizándose”, comenta el ganador de tres premios Ariel.

“A mí me gusta que los actores tomen una actividad profesional tan noble como lo es la actuación muy en serio, es una tarea muy competitiva, se necesita una enorme preparación, hay un enorme rigor con el estudio, una línea ética que tenemos que cuidar, valorar y respetar; yo todo el tiempo estoy pensando en la audiencia, en el público, me gusta entregar buenos resultados y una escuela siempre habla por sus alumnos, son los alumnos los que le dan prestigio a una escuela y eso es muy importante para mí”, afirma el actor para quien la responsabilidad lo es todo dentro de su profesión.

Me gusta que los actores alcancen la autosuficiencia, que tengan una mentalidad empresarial, que sean generadores de sus propios proyectos”.

‘El talento es un regalo de Dios’

Luis Felipe Tovar asegura que con el tiempo ha aprendido a distinguir quien tiene más posibilidades de alcanzar el éxito, siendo los actores que estudian, se preparan, perseveran, se entusiasman y se comprometen, pues para él “el talento es un regalo de Dios” que hay que saber manejar.

‘Un día particular’

Tovar, quien se denomina un promotor de la cultura en busca de proyectos artísticos, que desde su perspectiva son proyectos de vida, terminó el año pasado la temporada de la obra “Un día particular” al lado de Edith González.

“El teatro lo tenía abandonado porque estaba interesado en otro tipo de proyectos, empezando por cuestiones de carácter familiar: me gusta mucho estar con mis hijos, con mi familia, y el año pasado en el teatro solamente hice ‘Celia, el musical’, que dirigía y actuaba yo, y este año me animé a hacer este proyecto porque me gusta mucho la obra, porque creo que es una historia muy hermosa… hacerlo con Edith que quiero tanto, que respeto tanto, que admiro tanto… el proyecto en general me pareció muy atractivo y sabía que iba a funcionar”.

El escenario, su hábitat natural

Luis Felipe se termina describiendo como un hombre nervioso e inquieto que disfruta mucho lo que hace, “todo lo disfruto mucho, todo me gusta. Evidentemente como en todo, hay proyectos que tienen más fortuna que otros, hay proyectos que alcanzan a trascender más que otros, pero mi esfuerzo, mi compromiso, mi pasión siempre es al 100 por ciento. Uno quisiera que la gente salga siempre satisfecha, que es nuestro deber, nuestra obligación, que además hacemos con mucho gusto y lo disfruto, disfruto estar en el escenario, para mí el escenario es mi hábitat natural”.