El templo sagrado de los Jedi que utilizó Luke Skywalker para escondenderse y que se presenta en la película de “Star Wars: Los Último Jed”, es una isla que se encuentra en las costas de Irlanda y está abierta al público para ir a conocerla.
Skellig Michael, también conocida como Great Skellig, es una de los dos islas localizadas en la costa suroeste de Irlanda, y con el éxito de la última cinta de Star Wars, ha comenzado a convertirse en un destino turístico que recibe a diversos tipos de visitantes, de acuerdo con una nota de Business Insider.
Si lo único que quieres es echarle un vistazo a la isla, hay una línea de cruceros que hace un recorrido de dos horas entre abril y septiembre; en la travesía, podrás descubrir parte de la fauna de la isla como frailecillos, gaviotas y pardelas.
También está The Isle Awakens, un tour de 11 días al cual pueden registrarse aquellos fanáticos de corazón.
En su página web Brendan Vacations, la agencia que organiza este recorrido, “podrás viajar a bordo de tu landspeeder (auto de alquiler) y explorar los lugares de rodaje de Star Wars, incluidos Skellig Michael y Malin Head, así como otros sitios populares mientras aprendes sobre la cultura e historia de Irlanda”. Si se reserva antes del 11 de enero, se pueden ahorrar cerca de 200 dólares por pareja en vuelos.
En la última cinta de la saga de Star Wars, Rey (Daisy Ridley) va en busca de Luke (Mark Hamill), quien vive exiliado en una remota isla del planeta Ahch-To.
Entre los siglos VI y VIII, Skellig Michael fue hogar de monjes que decidían apartarse de la civilización para vivir acorde con los preceptos del cristianismo.
Las construcciones hechas con piedras que aparecen como las moradas de los caretakers así como las escaleras, no fueron creadas para la película, sino que fueron construidas por los mismos monjes en esa época.