¿Eres de las personas que este fin de año van a bromear porque no lograron sus propósitos del año pasado? No fuiste al gym, no adelgazaste, no cambiaste de trabajo o no te reconciliaste con esa persona que estás peleada. Todavía te da risa, pero en el fondo sabes que algo no está bien y que no te deja cumplir tus metas. No te angusties, sabemos que es difícil, pero también sabemos que no es imposible: lo mejor es comenzar con toda la actitud y no dejarla caer. Pase lo que pase.

Por qué no logras tus propósitos

Le preguntamos a la psicóloga Fabiola Flores, quien nos platicó algunas razones usuales por las que no cumplimos las aspiraciones que compartimos con tanto gusto en la cena de fin de año.

Elegirlos muy complejos. No es malo pensar en grande, pero eso puede hacer que desistas a la mitad del camino. Lo mejor es plantear metas más simples, por ejemplo: si quieres adelgazar, comienza de un kilo en un kilo.

No propongas cosas vagas. Como comenzar a hacer ejercicio o ganar más dinero. Es preciso que propongas actividades más exactas como:hacer bicicleta una hora diaria en el parque de mi fraccionamiento o cambiarme de trabajo en el área de… y pensar exactamente en el puesto.

Renunciar pronto. Es probable que tus propósitos fracasen si los intentas sin tener un plan. Debes darle tiempo al objetivo, de lo contrario no se podrá lograr; si esperas cumplir un objetivo demasiado ambicioso en el primer mes, vendrá una desilusión que te lleve al abandono.

Falta de motivación. Si no estás convencido del propósito es mejor que ni lo intentes, porque si buscas iniciar sin tener la concentración, no tendrá caso.

Y cómo estar bien con la familia

El perdón se reconoce como un valor fundamental para estar bien contigo mismo, no tanto con la persona con la que tienes dificultades.

El respeto es un valor universal. Si comienzas a respetar y tratar a tu familia y amigos como deseas que te traten, no tendrás problemas.

La comunicación es un bien necesario si quieres tener una buena relación no solo con tu familia, sino con amigos. Mientras más y mejor expreses tus sentimientos, podrás lograr una mejor conexión con tus seres queridos.

No critiques. Hablar mal de las demás personas no te deja nada bueno. Además de mala costumbre es una falta de respecto hacerlo, más si la persona no está presente.

Fuente: Fabiola Flores

Psicóloga