Su talento y encanto se encuentran por encima de su belleza. Cubana de nacionalidad, pero incrustado parte de su éxito en España, Ana de Armas inició con el pie derecho su trayectoria histriónica al protagonizar “Una rosa en Francia”, pero no fue sino con la exitosa serie “El internado” que se ganaría el corazón de su público y fans, que hasta la fecha la siguen por su papel de Caro. En 2017 Ana pisa fuerte luego de ser bien recibida por la crítica en su papel del refrito “Blade Runner 2049”, en que interpreta a una mujer producto de inteligencia artificial; por si fuera poco, ha sido incluida como una de las actrices a seguir de la revista Variety.

Éxito de poco a mucho

Nació en la isla de Cuba y cuando apenas tenía 14 años fue elegida para aprender en la Escuela Nacional de Arte de Cuba. Su primer papel le llegó a los 16 años, dos años más tarde sería contratada por la productora Globomedia, una de las más importantes en España, para aparecer en 56 capítulos de la serie –un verdadero parteaguas en el país ibérico– “El internado”.

Consolidando carrera

La serie que por tres años le daría presencia en aquel país también le abrió muchas puertas. En 2008 fue la portada de la revista masculina FHM, al año siguiente en Must! Magazine y ese mismo año de la revista de moda Vanidad. En 2009 trabajó en la película “Mentiras y gordas”, que se convirtió en una de las películas más taquilleras.

La nueva musa de Hollywood

Bella y con 28 años, se encuentra en este continente desde hace cuatro años, en que ha picado piedra y se ha abierto camino hasta lograr ser considerada la nueva musa, luego de sus papeles en “Hands of the Stone” y “Blade Runner 2049”.

Aprovechando la inercia

Esta cubana suma ya cinco filmes de producción estadounidense en su historial, por lo que se siente orgullosa; pero más que eso, ha logrado ingresar a un mercado, que si bien se encuentra predispuesto a los latinos, es muy complejo.

De moda futurista

La minifalda, una camisa y una cazadora efecto biker de color verde completaron su vestuario. Así se ha dejado ver Ana con una imagen de estrella en ascenso en la Meca del cine, con creaciones al estilo de Thierry Mugler y Grace Jones, muy de acuerdo con la moda de los años 80.

Viviendo el sueño americano

Ana dice que está acostumbrada a los cambios y, aunque le cuestan trabajo, los toma cuando vienen aun y con las limitantes que ocurren en un principio. Ya con tres años viviendo en Los Ángeles dice que nunca imaginó estar a un lado de esas estrellas de Hollywood.

Vida personal

De su vida personal se sabe poco. Estuvo casada con el actor español Marc Clotet de 2011 a 2013. Luego estuvo con el cazatalentos Franklin Latt, y se le vio romántica con Édgar Ramírez, compañero de rodaje en “Hands of Stone”; pero recientemente también se le ha visto con el hijo de Clint Eastwood.

Un poquito más sobre Ana

• Es buena amiga de sus amigos

• Tiene el ritmo en las venas

• Desde bebé, muy bella

• Está muy orgullosa de su tierra

• Su familia es lo más importante

• Tiene un perro que se llama Elvis

• Le gustan los deportes rudos