Por Marisol Rodríguez
El invierno, las bajas temperaturas y los días más cortos son factores que pueden influir para que dejes de hacer ejercicio en esta época del año. Además de invitarte a llevar una vida sedentaria y consumir alimentos con muchas calorías.
Si es tu caso, es importante que recuerdes que a través del ejercicio tu cuerpo es capaz de producir sustancias químicas, entre ellas las endorfinas, las cuales estimulan el bienestar y promueven un mejor estado de ánimo.
Con la práctica de algún deporte o rutina en esta temporada de frío, también se queman calorías rápidamente, gracias al gasto energético que implica el ejercicio en suma con el trabajo que realiza el cuerpo para mantener la temperatura corporal.
¡Que el frío no te detenga!
Conoce los principales beneficios de hacer ejercicio en invierno:
Quema calorías
Cuando se practica una rutina con bajas temperaturas, se aumenta la actividad metabólica con el objetivo de que las células consuman más energía para transformarla en calor.
Mejora la forma física
Con el frío, el cuerpo debe mejorar su rendimiento y esto incluye la capacidad cardiovascular, que reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares y derrames cerebrales; la cardiopulmonar y el desarrollo de músculos.
Aliado del sistema inmune
Un estudio publicado por el Journal of Applied Physiology, señala que los leucitos y granulocitos, responsables del buen funcionamiento del sistema inmunológico, aumentan su producción con el ejercicio a bajas temperaturas.
Eleva el ánimo
El ejercicio hace que liberes endorfinas, que te desconectes de todo y planees metas, mejorando tu sensación de bienestar y alejando el estrés, la ansiedad y depresión.
Crea una rutina positiva
Si realizas deporte en invierno, tu cuerpo y mente se acostumbran a ejercitarte durante todo el año y cuando empiecen a subir las temperaturas, ya tendrás una buena condición física.
Es divertido
Más allá de verlo como una obligación, también puedes enfocarte en su lado divertido y practicar deportes de temporada, por ejemplo, si planeas viajar a un destino con nieve: patinaje sobre hielo, esquí o snowboard.
10 consejos para su práctica
- Realiza calentamientos y estiramientos más largos, aproximadamente de 10 a 15 minutos, ya que los músculos están más entumecidos por el clima frío.
- Protege adecuadamente las zonas más sensibles de tu cuerpo: cabeza, cuello, labios, nariz, pies y manos.
- Utiliza ropa adecuada, lo ideal es vestir con tres capas: la primera se encargará de absorber el sudor, la segunda debe ser térmica y la tercera, impermeable, rompevientos y transpirable.
- Abrígate muy bien al salir de casa y al volver, antes y después de hacer ejercicio.
- La alimentación también es clave, si te ejercitas por la mañana, toma un buen desayuno que incluya cereales, leche y frutas.
- Recuerda el protector solar. Es tan fácil quemarte con el sol en invierno como en verano. Usa un protector solar que bloquee los rayos ultravioleta y que tenga FPS de al menos 30.
- Para mantenerte bien hidratada, al igual que como lo haces en el clima cálido, bebe agua o bebidas deportivas antes, durante y después de tu entrenamiento, incluso si no estás realmente sedienta.
- Casi todo el mundo puede ejercitarse con seguridad durante el tiempo de frío. Pero si tienes ciertas condiciones como asma o problemas del corazón, consulta a tu médico antes de iniciar cualquier rutina con este clima.
- Elige un equipo adecuado.Si es de noche cuando se hace ejercicio en exteriores, usa ropa reflectante. Para mantenerte firme sobre tus pies, elige el calzado con suficiente tracción para evitar las caídas.
- Hacer ejercicio cuando hace frío o llueve puede volverte más vulnerable. Si te empapas, es posible que no seas capaz de mantener tu temperatura corporal lo suficientemente alta, lo cual puede ser peligroso. Si la temperatura desciende o la sensación térmica es extrema, considera la posibilidad de tomar un descanso.
