Por Marisol Rodríguez / Foto: Internet
Las vacaciones se acercan y una gran opción para que tus niños se diviertan y aprendan cosas nuevas son los campamentos de verano.
Para elegir el mejor, piensa en el objetivo de llevarlo a uno: jugar y divertirse, reforzar o mejorar en sus estudios u aprender una nueva actividad.
Al asistir al campamento tus niños obtendrán muchos beneficios, conócelos.
Más sociales
Tener contacto con niños de su edad les ayuda a crear nuevos lazos de amistad y afianzar los que ya tienen.
Trabajo en equipo
Al participar en actividades compartidas adquieren o refuerzan valores como el respeto, solidaridad, tolerancia, ayuda y aprenden a compartir.
Adiós a la rutina
Desarrollar actividades diferentes a las que hacen el resto del año, más lúdicas y propias de esta época del año, provoca que sientan un cambio de rutina y asistan con mejor predisposición.
Mejora la comunicación
En estos espacios los niños tienen la posibilidad de expresarse de forma libre, se fomenta la participación en el desarrollo de las actividades y aprenden a respetar las opiniones de los demás.
Aumenta su seguridad y confianza
Un campamento de verano es perfecto para potenciar su autonomía e independencia, ya que aprenden a tomar decisiones por sí mismos, asumen responsabilidades propias de su edad y mejoran su autoestima y seguridad.