En 58 años de carrera artística esta es la tercera vez que Tania Libertad hace un homenaje al compositor guanajuatense, siendo el disco “José Alfredo y yo” el número 45 en la discografía de la peruanomexicana.

En entrevista para WEEKEND Tania Libertad cuenta el proceso de realización de este material, el cual ya se encuentra a la venta en físico y en las plataformas digitales.

“José Alfredo y yo” tiene 15 temas, los cuales son canciones que Tania había dejado fuera en sus otros homenajes, pero que siempre se había quedado con las ganas de interpretar, además de unos cuántos que ya son básicos en el repertorio de la cantante.

“Yo empecé por seleccionar algunas de las canciones que no había cantado, como ‘Vámonos’, ‘No me amenaces’, ‘Cuando vivas conmigo’, ‘Amarga Navidad’… y complementé con nuevas versiones del primer homenaje, porque un disco de José Alfredo no está completo si no lleva canciones como ‘Mundo raro’, ‘Amanecí en tus brazos’, ‘Cuando sale la Luna’, o ‘Tu recuerdo y yo’, entonces hay unas imprescindibles y hay otras que sí las puse porque nunca las había cantado”, cuenta la cantante, quien describe al compositor como uno de los grandes autores a los que siempre recurren los que quieren encontrar buenas canciones para un repertorio.

Para Tania libertad, quien según sus palabras ha cantado siempre lo que ha querido, “esto de volver a cantar a José Alfredo es como una especie de añoranza que tenía”, añoranza que también tiene por volver a Ciudad Juárez, un lugar donde solo ha recibido cariño y calidez de parte de sus fanáticos.

“Ciudad Juárez fue de las primeras ciudades a donde yo fui a cantar cuando llegué aquí a México en el año 80, cuando había el famoso Festival de las Fronteras y me mandaban a cantar a Juárez y yo era muy feliz”.

Volviendo al disco, Libertad hace énfasis en que fue realizado de una manera muy especial: primero aclara que no es un disco de mariachi, pues usó un formato de cuarteto de cámara, con chelo, viola y dos violines, el cual mezcló con dos trompetas y la base del mariachi, que es guitarra, guitarrón y vihuela, lo que le da un color distinto a las canciones de José Alfredo.

“También en mi forma de interpretar, no es la misma de como yo canté hace 30 años, en el primer homenaje que hice a José Alfredo; esta es una interpretación más madura, de una personalidad de una mujer que ha vivido 30 años después muchas cosas, muchas experiencias de todo tipo y también la madurez artística y entonces todo eso hace que las interpretaciones sean diferentes para mí: desde mi punto de vista son mejores ahora y a parte de eso yo hice los arreglos, yo hice la producción, hice la selección de canciones, estuve muy involucrada con todo el disco, entonces es un reflejo muy personal, o sea, así soy yo como estoy cantando en ese disco”.

Sobre la música mexicana, ella está segura que siempre es buen momento para escucharla, pues nunca pasa de moda. También confiesa que sus discos los hace para que le gusten a ella y después espera el buen recibimiento del público.

“Yo hago mis discos primero para mí, porque me tienen que gustar mucho a mí, y después espero que le guste a la gente; entonces yo sigo mi caminito, el que me dicta mi corazón y mis sentimientos, yo hago lo que me pide mi cuerpo y mi alma hacer en ese momento, entonces desde ese punto de vista estoy tranquila porque además este disco está en los primeros lugares de venta, está dando batalla”.

Por último agradece a sus fanáticos fronterizos su preferencia, y les aconseja que escuchen “José Alfredo y yo” acompañados de “un tequilita, un vinito, lo que quieran” y así descubran todas las “cosas bonitas” que están dentro de esta producción.