La lactancia materna es una de las mayores manifestaciones de amor que una mamá puede tener hacia su bebé.
“Como pediatras, siempre vamos a estar a favor y promoviéndola por el sinfín de beneficios que tiene para el bebé, no solamente en cuanto a nutrición, sino a nivel del sistema inmunológico, para disminuir el riesgo de ciertas enfermedades, y también tiene beneficios para la mamá”, expresa la alergóloga y pediatra Grecia Hernández Salcido del Centro Médico de Especialidades.
En el marco de la Semana Mundial de la Lactancia Materna, la especialista nos habla de su importancia.
Clave para su nutrición y sistema inmunológico
La leche materna contiene una gran cantidad de nutrientes, los cuales son necesarios para el crecimiento y desarrollo del bebé.
“Por lo menos en los primeros seis meses va a ser fundamental para los niños, ya que al momento en que nacen su sistema inmunológico todavía está demasiado inmaduro, si tiene con qué defenderse pero los anticuerpos están en proceso de maduración y por lo tanto, tienen más riesgo de tener más enfermedades”, señala.

La leche materna, sobre todo la primera cantidad conocida como calostro, contiene altos niveles de inmunoglobina, principales anticuerpos que protegen contra diversas enfermedades, así como vitaminas y minerales.
“También contiene algunas proteínas que son péptidos antimicrobianos, así cualquier cosa que entre a través de la boquita del bebé, la leche materna va a poder protegerlo a través de estos”, comenta.
La doctora agrega que es importante mantenerla un mínimo de seis meses porque es el tiempo en que el sistema inmunológico ya puede producir ciertos anticuerpos y células de calidad.
En cuanto a la digestión, expresa que la leche materna se digiere más fácil que la de fórmula y disminuye síntomas gastrointestinales comunes en los recién nacidos, por ejemplo, los cólicos, el reflujo y la disquecia del lactante (falso estreñimiento).
Disminuye el riesgo de enfermedades
La especialista comenta que diversos estudios indican que la leche materna “puede disminuir posibilidades de cáncer infantil, de que en algún momento de su vida desarrolle diabetes de tipo 2, que les dé obesidad y va a defender contra las principales enfermedades respiratorias y alergias como rinitis y asma”.
En pro del desarrollo neurológico
Otro de los grandes beneficios de la lactancia materna es en la cuestión neurológica.
“Se ha visto que estos niños llegan a tener coeficientes intelectuales un poco más altos que los que no fueron alimentados con leche materna”, señala.
Además, se fortalece el vínculo emocional y refuerza el apego entre mamá y bebé.

Mamá también se beneficia
La lactancia materna no solo beneficia al bebé, sino también a la mamá, ayudándole a bajar de peso y disminuir el riesgo de cáncer de mama y ovario.
“De cierta manera también funciona como un método anticonceptivo, aunque sabemos que no es el más confiable, pero si puede ayudar durante los primeros meses”, agrega.
Por último, invita a las mamás a que si detectan alteraciones en la técnica, acudan con un asesor de lactancia, ya sea pediatra o nutriólogo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda mantener la lactancia materna hasta los 2 años de edad.