Afirma la filóloga y lingüista Concepción Company Company que el idioma español no será victima del lenguaje que se llega a utilizar a través de las redes sociales y los chat.
La especialista, también miembro de la Academia Mexicana de la Lengua, consideró que el lenguaje de los medios digitales atiende a un principio de economía para entablar una comunicación rápida.
“Yo creo que el español goza de cabal salud, que vive en el mundo de los contactos y de las comunicaciones, por supuesto, y que hay un principio básico de economía: que la lengua tiene que llegar rápido y de manera eficiente, rapidísimo en los medios, y ese principio de economía ha estado generándose y está funcionando”, aseveró.
Comparó el chat con la actividad de un escribano del siglo XVI que tomaba notas de acuerdo con lo que escuchaba, con múltiples abreviaturas e inventando lo que no entendía o escuchaba correctamente.
“Sí hay un problema de fondo que no tiene que ver con el chat: hemos abandonado la educación, intentar que nuestros jóvenes lean, abran mundos, imaginen, entonces somos lectores pasivos”, consideró la experta.
La lengua, un patrimonio
En entrevista con la Agencia Informativa Conacyt, tras impartir la conferencia titulada La identidad lingüística del español de México en el Festival del Conocimiento 2017, la investigadora emérita de la UNAM subrayó que la lengua es un patrimonio de las sociedades, lo que motiva discusiones intensas para determinar si se habla correctamente.
“Siempre ha habido puristas, si la lengua no fuera patrimonio, nadie pensaría que es un tesoro que hay que defender, por eso son tan acaloradas las discusiones acerca de si se habla bien o mal el español, sobre si se pueden meter anglicismos, pero eso ha ocurrido siempre, no hay que escandalizarse”, declaró.
Estimó que el hecho de que las lenguas sean patrimonios intangibles deriva en su defensa para conservarlas, lo que interpretó como una buena señal.
Sin embargo, Company opinó que “los puristas tienen la batalla perdida” ante el dinamismo del lenguaje de los jóvenes en los medios de comunicación digitales, fenómeno que calificó como “avasallador”.
“Para mí no hay ni buenos ni malos, es nada más materia de estudio, hay que dejarlo sedimentar y dentro de unos años vamos a poder ver el efecto y habrá cambios lingüísticos seguramente interesantes como cualquier cambio, que van a ir reconfigurando la lengua española”, comentó.
Enfatizó que para los lingüistas no hay clasificaciones como “bueno”, “malo”, “correcto” o “incorrecto”, únicamente gramatical o agramatical, y todo lo que dicen los hablantes es considerado gramatical.