Por fin la mejor temporada del año. La Navidad ya está aquí y para darle la bienvenida comenzamos con la transformación de nuestro hogar y así la decoración de cada rincón, sin dejar fuera la tradicional corona que luce en la puerta principal o en las paredes que combinan con nuestro espíritu lleno de amor y paz.

La corona navideña, como hoy la conocemos, tiene su origen en la tradicional corona de adviento, la cual significa por su forma redonda la vida eterna, mientras que el color verde de sus ramas representa la vida y la esperanza.

Las velas

Con las cuatro velas se pide que regrese la luz y el calor a nuestros hogares una vez que termine el invierno y estas deben prenderse de una a una cada domingo, iniciando el cuarto domingo antes de Noche Buena.

Las manzanas

Por su parte las manzanas rojas refieren al fruto del jardín del Edén y las nueces, piñas y semillas son símbolos de resurrección y permanencia en la vida. Por último, pero no menos importante, está el moño rojo hecho con listón que manifiesta el amor por Dios.

Y aunque la corona de adviento en un principio fue hecha para colocarla en el centro de la mesa, con el paso del tiempo esta se ha ido transformando y cambiado de lugar, por lo que ahora no es extraño verla realizada de múltiples materiales y colocada en las puertas y paredes de nuestros hogares y hasta en el lugar de trabajo, siendo un recordatorio constante de que la Navidad ya está por llegar.

Hazla tu misma

Coronas hechas completamente de brillantes esferas y llamativos colores, para lo cual solo necesitas una corona de unicel, listón del mismo color que las esferas o que te sirva de fondo y silicón para fijar las esferas; aquí solo debes poner una sobre otra hasta cubrir el círculo, quedando como resultado una espectacular corona.

Otra increíble manualidad es la corona de tela, elaborada con pedazos de yute sujetados en una guirnalda de red que ayude a fruncir la tela; también le puedes agregar figuras con motivos navideños, un moño y diamantina.

Aunque si lo prefieres puedes hacer una tradicional, con escarcha de colores o verde, no importa cómo lo quieras hacer, pues hasta dulces, fieltro, ramas y demás materiales puedes usar. La idea es que disfrutes del espíritu festivo de la temporada y te atrevas a llevar más allá de la imaginación tu decoración de Navidad.