Por Marisol Rodríguez / Fotos: Internet
El amor propio es reflejo de una sana autoestima, transmite seguridad y personalidad, pero cuando se va al extremo y se convierte en una adoración excesiva de uno mismo, no.
Lo anterior, asociado a un sentimiento de grandiosidad, necesidad de admiración y falta de empatía, es resultado del Trastorno de la Personalidad Narcisista.
La doctora en Educación y psicóloga Betsabé Ruizesparza Flores lo define como la exageración del egocentrismo de la persona que lo padece y explica que se da comúnmente por “malas relaciones entre padres e hijos, exceso de devoción o de crítica”.
Algunas investigaciones también apuntan que se debe a la genética, por características heredadas y a la neurobiología, por la conexión entre el pensamiento, conducta y cerebro.
Características de un narcisista
- Altamente prepotente
- Sentido de privilegio
- Necesidad de ser admirado
- Exagera logros y talentos
- Preocupado por el éxito y la belleza
- Se cree superior a los demás
- Monopoliza las conversaciones
- Envidia
- Insiste que es el o la mejor en todo
Sus consecuencias
- Aislamiento social
- Problemas en entorno familiar, laboral, con los amigos y de pareja
- -Depresión y ansiedad
- -Desarrollo de adicciones
- -Conducta suicida
¿Qué hacer?
La especialista señala que este “es un trastorno muy común que se presenta más en los hombres y llega a ser muy desgastante para la persona que lo padece como para las que están en su entorno. Lo mejor siempre será buscar ayuda”.
Dependiendo en qué nivel se encuentre el trastorno en la persona, se recomienda ir a psicoterapia y/o ser evaluado también por un médico psiquiatra.
Fuente: Dra. Betsabé Ruizesparza Flores / betsabe_ruizesparza@icloud.com