En estas fechas en las que no paran las fiestas es normal que se coma en exceso y no haya un proceso normal de digestión.
Nuestra dieta se ve severamente afectada porque tratamos de comer de todo y a todas horas. Los guisos que se consumen van desde pescado, mole, pastas, pasteles, carne con gravy o relleno; mientras que las bebidas alcohólicas y refrescos en demasía hacen mucho daño.
Este problema de salud en varios países latinoamericanos también se conoce como ’empacho’ que, de acuerdo con el sitio de medicina tradicional mexicana, de la UNAM, es cuando “el enfermo ‘repite crudo’, empieza a escupir, y luego le viene el vómito crudo, porque el estómago no ‘coce’ la comida”. Es decir, es la incapacidad del estómago para procesar los alimentos. El paciente siente el estómago “esponjado”, es decir “inflamado”, le “suena sofocado, empanzonado, produce gases”.
Andar indigesto es una de las sensaciones más incómodas y aquí te vamos a decir lo que puedes hacer para evitarlo:
- Controlar la ingesta de alimentos grasos.
- Evitar alimentos que produzcan acidez.
- Tratar de ordenar nuestros alimentos y evitar caer en la ansiedad de comer mucho de todo.
- Evitar ir a la cama antes de 2 horas de haber comido.
Sin embargo, si estos consejos llegaron demasiado tarde y ya se atraviesa por un cuadro de indigestión, aquí hay algunas maneras de ayudar a sanar lo más pronto posible:
- Preparar una infusión digestiva de anís con manzanilla.
- También el té de jengibre es fenomenal.
- Los tés de semilla de hinojo ayudarán a digerir más rápido lo que ha ocasionado problemas.
- Un vaso de agua tibia con una cucharada de bicarbonato de sodio.
- Pastillas de carbón activado.
