Por Marisol Rodríguez
Más allá de ser una tendencia de moda, el mindful eating o alimentación consciente es un estilo de vida que permite relacionarse de una manera sana y mental con la comida.
Uno de sus principales objetivos es que las personas distingan las sensaciones fisiológicas y emocionales, es decir, aprender cuándo existe el deseo de comer por hambre o necesidad, y detectar cuándo están saciadas y el cuerpo no necesita más alimentos.
La Universidad Oberta de Catalunya en conjunto con la de Harvard y Nueva York publicó un estudio titulado ‘La neuromodulación prefronto-cerebelosa afecta el apetito en la obesidad’, el cual afirma que “diferentes sistemas cerebrales pueden determinar el éxito o fracaso a la hora de cumplir el objetivo de seguir una alimentación saludable”.
Entrena tu cerebro
Para centrarte en comer por necesidad física y no por saciar tus emociones, toma nota de los siguientes tips:
- Bebe agua antes de comer
Al tomar un vaso de agua antes de cada comida puedes reducir la ansiedad, ya que aumenta la sensación de saciedad.
- Come sentada y tranquila
Te ayudará a estar más concentrada en tus alimentos e ingerir únicamente lo necesario.
- Si no tienes hambre no comas
Es clásico sentarse en la mesa y comer por costumbre o por cumplir un horario, sin pensar si realmente tienes hambre o no.
- Mastica despacio
Saborea tus alimentos, disfrutar más de la comida también hará más fácil el proceso de digestión.
- Come de todo
Presta atención a los nutrientes que tu cuerpo necesita, come de forma variada y de manera responsable.
- Olvídate de la sensación de tener el estómago lleno
Aprende la diferencia entre estar saciada (no necesitar más comida) y estar llena (haber comido más de la cuenta y tener sensación de pesadez).
- Identifica tus emociones
El aburrimiento, estrés o tristeza pueden hacer que comas cuando realmente no tienes hambre; mejor adopta costumbres más sanas como practicar un deporte.