La dinámica de la vida dicta un ritmo atropellado en el que todo es acelerado. En el desayuno, si es que se tiene, lo haces apurado; los traslados de la casa al trabajo y viceversa también; en el trabajo hay juntas y siempre mucho quehacer. Todo esto impacta diariamente tus pensamientos y estado de ánimo, bajo el nombre de estrés. Seguro has tenido un día en el que derramaste el café sobre tu ropa, olvidaste tu portafolio o no encuentras las llaves de tu carro y se te hace tarde. Todos hemos experimentado un mal día, pero para evitarlo o rescatarlo Weekend charló con Abigail Ruiz, experta en programación neurolingüística, quien nos ofreció una serie de consejos para tener un buen día.
“¿Qué valor le das a tu vida y a tu día para no utilizarlo de forma positiva? Piensa la respuesta, ya que de acuerdo con su importancia es como se desarrolla un buen o mal día”, indicó Abigail.
- Tus pensamientos tienen una influencia mayor de lo que imaginas en tu día.
- Sonríe. La serotonina es la hormona clave de la felicidad, ya que regula el humor, evita la depresión, impide el enfado y te hace feliz y sociable. Sonríe.
- Vive el momento presente, aquí y ahora.
- El pasado ha sido una parte importante en tu vida, de la cual debes tomar lo que sea funcional, todo aquello que te permita crecer y desarrollarte. Lo que no, ahí lo puedes dejar.
- Tu buen y excelente día depende de ti. Cada día tienes oportunidades de experimentar, lograr, intentar, acertar, equivocar y recrear todo lo que necesites.
- Desarrolla tus metas. Tus logros son el plus de la energía aplicada para continuar tu historia con trascendencia, tú haces tus logros, tus logros no te hacen a ti.
- Enfoca tu atención y energía en todo aquello que representa alegría, motivación, celebración y amor en tu vida, no pierdas la oportunidad de vivir de una forma libre.
- Se práctica. Es importante también la organización para que tu día pueda fluir de una mejor manera; si sabes a dónde vas, podrás tomar el camino.
- Personaliza tus espacios, con esto te sentirás en comodidad de disfrutar tus actividades diarias.
- Cada día intenta vivir algo que realmente te apasione, que realmente disfrutes, que sea ese regalo de inspiración para sentir el impulso de energía para hacer lo que te gusta.
ADEMÁS
El ejercicio, descanso y una buena alimentación forman también parte fundamental de un buen día.
