Por Marisol Rodríguez / Foto: Internet

La tolerancia es un valor que, hoy en día, juega un papel muy importante en las relaciones de los niños con aquellos que los rodean.
El ser tolerante significa ser respetuoso, indulgente y considerado con los demás, aceptar la diferencia o la diversidad.
Para que los niños establezcan buenas relaciones con sus semejantes, es esencial que aprendan sobre este valor desde pequeños, que escuchen las ideas y opiniones de sus amigos, que acepten criterios distintos a los suyos y que consigan ponerse de acuerdo mientras juegan o realizan alguna actividad en el aula.

Sus beneficios

• Fomenta el autoestima
Al respetar a quienes tienen a su alrededor, también aprenden a ser respetuosos con ellos mismos y ganan más confianza.

• Favorece las relaciones
Tus hijos jugarán en el parque o el colegio con todos los niños por igual sin ponerles etiquetas o discriminarlos por su raza, religión o situación económica.

• Evita conductas agresivas
La educación en tolerancia es educar sin violencia o agresividad, de esta forma los niños mediarán en los conflictos o denunciarán casos de bullying.

• Desarrolla su sensibilidad
Su mente se abre a vivir nuevas experiencias, intercambiar opiniones diversas y desarrolla una sensibilidad especial hacia los demás.

• Más felices
Un niño que es agradecido y tolerante siempre será un niño más feliz.