Nuestra rutina diaria de limpieza debe incluir tres sencillos pasos: lavar, tonificar e hidratar, de los cuales la mayoría solo cumplimos dos, dejando a un lado la parte del tónico, con el que seguro tu cutis luciría espectacular, pues este es el que se encarga de mantener el pH de nuestra piel en un nivel estable.

Conócelo

Para quienes no conozcan qué es y cuáles son los beneficios de utilizar un tónico facial, comenzaremos con decir que este producto es un astringente que se usa en el proceso de limpieza y exfoliación de la piel, el cual ayuda a eliminar el exceso de aceites y bacterias que muchas veces se quedan rezagados después de lavar tu cara.

Como dato importante, es bueno saber que el tónico debe estar libre de alcohol, pues de lo contrario, en vez de sentir tu rostro limpio y fresco, sentirás la cara reseca por varios días; además, siempre debes buscar el que vaya de acuerdo con tu tipo de piel.

Úsalo correctamente

El tónico facial debes usarlo siempre entre la limpieza e hidratación, de preferencia una vez en la mañana mientras te alistas para iniciar con tus actividades diarias y otra en la noche, después de lavarte la cara. También puedes utilizarlo después del gimnasio y de actividades al aire libre, tras lo cual te sorprenderás de la cantidad de suciedad y partículas que pueden albergarse en tu piel.

Además revitalizará y rejuvenecerá los tejidos, preparándolos para absorber de mejor forma los nutrientes del humectante; también equilibrará el pH de la piel y ayudará a cerrar los poros que pueden abrirse después de la limpieza facial o por la contaminación, el maquillaje e incluso por la almohada sobre la que dormimos.

Refresca tu piel

Por último también te ayudará a unificar el tono de la piel, reduciendo el enrojecimiento e hidratación, además de refrescarla.

Así que no eches en saco roto la importancia del tónico durante tu rutina de belleza, pues este es el complemento perfecto para hacer que tu rostro luzca radiante, sano y limpio.